Caemos, pero nos levantamos. Matan y asesinan a católicos en todo el mundo, pero número de creyentes crece cada año. Los jóvenes tenemos la oportunidad de continuar lo que nos dieron nuestros padres. Ellos fueron la bandera de la Iglesia, y ahora nos toca a nosotros. Sabemos que Cristianismo es VERDAD. Y cuando tomamos conciencia de ello, crece nuestra responsabilidad. La misma que nos quiso transmitir Juan Pablo II. Un Papa comprometido. Un Papa santo. Un Papa que se acercó a los jóvenes. ¡ No tengamos miedo !
No hay comentarios:
Publicar un comentario